El otro dia fui a ver a mis compañeros a Murcia y sobre todo a mi amigo Dani Miguélez, que es como un hermano y me dio mucha alegría verlos. Me comentaron la situación que tienen ahora mismo y es un poco lamentable lo que están pasando. Están demostrando que son unos profesionales y que quieren al Cádiz.
Fui al partido y hacía mucho frío y vi al equipo muy bien, me gustó mucho al estar muy compenetrado, jugando el balón con mucha movilidad e intensidad defensiva, que en esta categoría es básica. Me alegré mucho de la titularidad de Dani Miguélez, que hizo un gran partido y fue de los mejores del equipo porque hizo tres paradas muy buenas que salvaron al equipo. Al final fue una pena porque se veía más cerca el 0 a 2 que lo que después se vio: el 1-1. Se perdonó y el Murcia lo supo aprovechar en el último suspiro con un gol en el descuento que para mi forma de ver no se merecía.
Me dio muy buenas sensaciones el Cádiz, mucho más que el Murcia, que no me gustó a pesar de ser el líder. El Cádiz le supo jugar y encima en su campo, que es mas difícil. No hay que pasar por alto todo lo que están pasando los jugadores del Cádiz, que tienen muchos problemas y a pesar de ello saltaron al campo y defendieron con honradez y con mucho orgullo esa camiseta amarilla con tantos años de historia. Es de admirar lo que están haciendo estos jugadores por este club y ahora en estos momentos es cuando más hay que estar con ellos porque se lo merecen y lo necesitan, y seguro que con la ayuda de todos y estando todos unidos como ya pasó hace dos años, que la plantilla era una familia, se conseguirá el ansiado objetivo que es el ascenso.
Mención aparte me gustaría hacer a la afición, que no me cansaré de decir que es la mejor del mundo. El otro día, una vez más, me pusieron la piel de gallina, desplazándose a más de 6 horas de viaje y animando sin parar. Estando en un momento delicado al Cádiz nunca le fallan. Sin palabras. Es un orgullo haber sido parte de este equipo, que tiene esta afición increíble. He sido un afortunado por haber defendido la camiseta amarilla y para mí ha sido un gran orgullo. Fue la mejor decisión en mi vida haber jugado en el Cadiz, porque no hay día que no me acuerde de mi equipo, de mi afición y mi ciudad como es la de Cádiz. Un saludo a todos los cadistas de un cadista más, que aunque esté en la distancia es como si estuviese en Carranza y seré cadista toda mi vida.
FUENTE: EL DESMARQUECADIZ.COM
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