Mal juego, buen resultado, mejor jornada. Así de fácil se puede resumir lo vivido en el estadio Carranza con un Cádiz CF que no está fino, pero que impuso su mayor calidad y aprovechó para recortar puntos al Betis B, la Balona y el Lucena.
Se había especulado con que Murillo pudiera jugar en el lateral derecho y el recuperado Goicoetxea regresara al centro de la defensa, pero al final Moke repitió experiencia en la banda. También en la diestra se situó Juanse, ya que Ferreiro estaba sancionado, formando así un flanco inédito en un Cádiz obligado a ganar y a convencer tras el desastre de la pasada jornada contra el Caravaca La Unión.
Aburrido y con muy pocas oportunidades de gol discurría un partido entre dos equipos con objetivos finales tan dispares como el primer puesto y la permanencia. Tan sólo un par de arrancadas de Akinsola merecieron la atención de unas gradas muy animosas, pero que no iban a dejar pasar nada al equipo.
Pero, pese al mayor control en el centro del campo por parte de los locales, las dos acciones más peligrosas de la primera media hora cayeron de lado visitante. Góngora le quitó el balón de la cabeza a Paulino cuando el delantero verde iba a rematar totalmente solo en el área pequeña y a renglón seguido Aulestia tapó el remate al primer palo de Óscar, cuya galopada sorprendió a la defensa local.
A favor cadista sólo se contabilizaba un remate de Murillo a la salida de un córner, pobre balance para un equipo obligado al ascenso. Sin nada más que ofrecer se llegó al tiempo de descanso de un encuentro en el que lo más destacado fue una bronca en área visitante que terminó con dos amonestaciones y Akinsola muy enfadado, tanto que para evitar que cometiera una tontería en la reanudación Jose González decidió dejarlo en el banquillo entrando así Dioni.
La primera ocasión del segundo tiempo fue de nuevo para el Villanovense, esta vez por medio de Paulino, que no pudo batir a Aulestia en su remate desde dentro del área. Se reivindicó Dioni con una preciosa jugada a los cinco minutos de entrar. Con el balón controlado, se giró entre tres defensas y abrió el juego a Góngora, cuyo centro al área no fue demasiado bueno, pero el desajuste defensivo rival lo mejoró al permitir que el balón llegara a Juanse para que marcara a placer. El propio Dioni pudo sentenciar, pero falló un gol cuando lo más fácil era marcar.
Dos goles en dos minutos dieron emoción al partido. Primero empató Paulino con un perfecto remate de cabeza, pero su golazo fue neutralizado de inmediato por Dioni. El Cádiz tocaba, pero no finiquitaba un partido que parecía controlado, pero con un marcador muy corto Y creció el miedo cuando entre Aulestia y Murillo salvaron el empate a cinco minutos del final. Sin embargo, imperó la lógica y Juanjo marcó el tercero para dar tranquilidad a un equipo que debe confiar más en sus posibilidades.
CADIZ INFORMACION
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